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Esta ruta une el Área
Recreativa de la Dehesa del Oso con la cumbre del Cambrón, una mole
pétrea cuyas paredes se levantan casi verticales sobre un mar de
pinos, en el extremo norte del Parque Natural. En la Dehesa del Oso
(cuyo nombre evoca la presencia de dicho animal en la comarca hasta
mediados del siglo XVIII) disponemos de una fuente con abundante
caudal, mesas de piedra, pequeñas praderas y hermoso nogales.
El camino asciende suavemente por una
estrecha pista forestal en medio de un cerrado bosque de pino negral con
abundantes encinas y algunos quejigos, desde el que se disfruta de vistas
que van desde el valle del Onsares al calar del Mundo, valle de la cabecera
del Guadalimar y sierra de Alcaraz, en Albacete. Al final trepa por una
senda de pastores que se abre paso entre las rocas para alcanzar la
impresionante plataforma de piedra del calar, típico paisaje kárstico de
lapiaz con algunas dolinas, en el que sólo se atreven a crecer escasos pinos
negrales aislados (fenómeno curioso, porque en estos ambientes el pino que
predomina es el laricio).
Desde la caseta de vigilancia de
incendios se divisa una soberbia panorámica que abarca desde las llanuras
manchegas de Ciudad Real y Albacete hasta Sierra Nevada. Cruzando al otro
extremo del calar hay otra caseta perteneciente a Castilla-La Mancha. En la
zona abundan el avión roquedo y la chova piquirroja, y podemos contemplar el
vuelo del buitre leonado y del halcón peregrino.
INICIO: Por
la carretera A-310, de La Puerta de Segura a Siles, dirección Siles, pasado
el Km. 12 tomamos a la izquierda un carril en buen estado que pasa por la
aldea de La Pendolera. Al cabo de 14,8 Km. sin apartarnos por ningún desvío,
llegamos a la Dehesa del oso. El Panel de Inicio está en el Área Recreativa
de la Dehesa del Oso.
DISTANCIA: 5 Km. (ida).
TIEMPO: 1 hora y 30 minutos.
COTAS: mín. : 1.148 m. máx. : 1.553 m.
DIFICULTAD: media.
ENLACES: el carril de acceso a la Dehesa del
Oso coincide con parte del trazado del PR-A 151, Siles-Villarrodrigo-
OBSERVACIONES: La ruta comienza detrás del
panel de inicio. Una vez en el calar, las marcas de pintura sobre mojones de
piedras amontonadas y otros elementos con conducen sin dificultad a la
caseta de vigilancia. No es conveniente subir al calar con niebla porque
puede impedirnos ver bien las marcas.
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